Venimos en silencio casi los 20 kilómetros de recorrido. Cada una pensando en sus cosas que, aunque sean diferentes, en el fondo son muy iguales. “Problemas” ilógicos y falsos, preocupaciones ilógicas y falsas… al fin y al cabo perder el tiempo.
- Qué calladas vamos hoy…
- Síp..
- Sí, es verdad..
Vamos creciendo, ya ni siquiera mi mamá me distrae para evitar que me toque el haba en el roscón de reyes cuando voy a coger el trozo en el que está. Poco a poco empiezas a crecer y estar desprotegida. Por eso quizá empiezan a salir esos odiosos escudos que no nos permiten vivir libremente y sin pensar.
No quiero hacerme de hierro, fuerte e insensible.
No quiero no ser detallista, ni evitar abrazos.
No quiero sonrisas falsas ni conversaciones tensas.
No quiero no llorar.
No quiero vivir como si la vida me hubiera maltratado.
No quiero caerme sin encontrar tus brazos sujetándome después de haberme empujado. Y si no queda más remedio tendré que huir del fuego que me aturde la personalidad y disfruta quemándome. Aunque... intentaré estar un tiempo sin tomarme la vida tan en serio.
otra vez conmigo.
Y me digo: Anda ya mujé,
si to' tiene solución menos la muerte.
Y me digo: Anda ya mujé,
si to' tiene solución menos la muerte.
Buscome, Bebe.