Por fin la última entrada del año. He ido dejando pasar los días y al final casi me quedo sin tiempo para cerrar este año como debe ser.
No me da tiempo a hacer balance y en realidad no sé si quiero. Estoy deseando que se acabe este extraño 2008 que ha pretendido volverme loca. Pero conseguí llegar hasta el final de este año translúcido en el recuerdo y con tantos momentos surrealistas que ni siquiera he sido capaz de reflejar en este blog.
Haré balance algún día, sí, cuando considere que empezar a recordar cada momento merece más la pena que dejarlo ahí atrás vivido y semiolvidado.
En Noche Buena siempre hacemos un juego en el que te toca algo que te pasará en el año nuevo. El año pasado fue "un tractor" (sí, un poco raro) y ahora tengo un coche... este año me ha tocado SORPRESAS (supongo que malas y buenas) y me encanta.
Con la mente lista para recibir los vaivenes que al nuevo año se le antoje darme.
Llevo dos páginas intentando explicar por qué actualizo, darle un sentido, pero es imposible. Veo que soy tan dependiente que no sé escribir sin dirigirme a alguien cuando escribo. Pero en realidad solo quería poner esto:
Que esas seis letras formen parte de este blog antes de que acabe el fatídico 2008. Seguramente ni recuerdes que las tengo y digas al verlas ahí “si, si... mucho guardar letritas pero pierdes otras cosas”. Aún así ahí están, recordándome buenos tiempos y recordándome quien soy. Seis letras que no utilizará nadie más para jugar pero que forman parte de mi vida. No se lo imaginaría la persona que pulsa el botón que activa la máquina que las fabrica. Quiero que consten, para que queden como recuerdo de tantos buenos momentos que debo olvidar tan rápido como los malos. Porque este año no ha sido más que una lección de cosas que nadie llegaría a comprender. Prueba tras prueba siempre con moraleja. En este caso me quedaré con el fin olvidando los medios. "Acho, yo te regalo basura."
Finalizo la actualización con esta otra foto:
Tampoco le encuentro explicación lógica pero necesito tenerla ahí. Porque Dani se empeñó en que me gustaba (y me gusta ehh y me gusta) y se agachó recién operado para dármela. Del susto que me di al verle. Lo que echo de menos los días así. ¡Las ganas que tengo de ir a que me enseñe Huelva! Con lo pequeña que es... me trae muchos recuerdos.
[Teressa te echo de menitos]
Tengo una chapa de Frida Kahlo. Por tí y para tí pequeña sexyfly:
…déjame que ladrar en tu alcoba…
Tántas personas que me hacen estar bien... que tiran de mi. Momentos que, de verdad, no voy a olvidar nunca. No sé cómo explicarlo.. GRACIAS Gracias por quererme a vuestra forma y sin cansaros.
Hace mucho tiempo que no publico nada aquí pero sigo escribiendo. Escribiendo cosas que espero no volver a leer nunca, que no valen absolutamente para nada y que, he llegado a pensar, que ni siquiera existen. PEKIN (el verdadero). Hace tanto que no paso por aquí que… releyendo me pregunto si será este uno de los motivos:
“No hago más que desear que pasen rápido, que pasen ya esas 500 noches que, como bien dijo Sabina y yo nunca hasta ahora entendí, hacen falta para aprender a olvidar a alguien. Cuando el deseo de olvidar te invade y te araña, sí, araña. Tanto y tan fuerte que los gatos me recuerdan a ti. Los malditos gatos que están por todas partes y me traen tantos buenos recuerdos que jamás lograré entender por qué acabaron. “Dolía mucho y no fue nada”. Fue tan poco que lo fue todo, lo que necesitaba justo cuando lo necesitaba. Como una mano que me ayudó a pasar el punte entre el infierno y la vida. Sin saber por qué me suelta al final del recorrido y con la mirada perdida ando y ando y ando y cada vez entiendo menos. ¡Deja de volverme loca! Desaparece, vete, vete, vete, vete. Vuelve allí donde te esperan, donde brazos baten sin rumbo buscando una mano que les guíe. Yo te olvidaré sin querer aunque no haya mimos ni besos ni caricias que me llenen tanto como ver tus odiosos ojos. Que no tienes motivos ni yo tiempo para que me convenzas de que algo tuvo sentido. (…) Tus estúpidas imaginaciones. (…) Me divierte ver cómo todo esto me ha servido para aprender que el tiempo pone las cosas en su lugar y al final todo se sabe. Demostrar que fui sincera desde la primera nueve y media. Que podía haber jugado sucio y no lo hice. Que me quería dejar la piel y no me dejaste. Que hubiera sido más fácil oír tu plan desde el principio (…)”
Creo que de todos es el fragmento de texto que más me emparanoya. Aparece “Dolía mucho y no fue nada”. Que leería por ahí a saber dónde. Que forma parte de una canción preciosa que hace poco escuché por primera vez. Es difícil de explicar el.. mi vocabulario no tiene ninguna plabra que lo exprese... que me dió al leerlo ahí, llevo días sin poder parar de escucharla.
A raíz de ese momento extraño decido subir ese texto aquí, para escusarme de tanto tiempo ausente y dejo la canción en especial para mi hermanita que seguro que lee esto antes que nadie y va montándose su película mental.
Abajo: Mi abue, la cumpleañera, y algunos de mi family. Arriba: Su hermana, desde Málaga, felicitándole el cumpleaños junto a otros familiares de Málaga.
Conclusión... momentos únicos.
84 años hacía hoy y pretendíamos que entendiese a la primera que eso que veía en la pantalla era una videoconferencia a tiempo real. Que podía mandarle todos los besos que quisiera y que así era como se encontraba justo en ese momento la niña con la que jugaba en casa cuando era pequeña.
84 años... ¿Cuál será el regalo de mis nietos? ¿Una conexión 3D con Teressa?
Ella dirá... “Si esto es gratis ¿Por qué no me lo hacen todos los días?”
En realidad ni siquiera yo sé por qué no lo hacemos todos los días…
Ahora que sabía que podría pasarme la vida entera alimentándome solo de tostadas. Ahora que me daba todo igual porque sabía que nunca encontraría cosas tan sencillas que me dieran tanto.
De repente, ABSOLUTamente arrastrada por el momento, el subconsciente y la cantidad de realismo que el tiempo me ha hecho tener siempre presente me traicionan. Se cansan de pensar por mi y dejan directamente que caiga desplomada al vacío del sinsentido contándote cosas que nunca has merecido oír.
Mientras me sorprendo con mi propio comportamiento y pienso que a veces ser sincera no sirve para nada. Pero al instante entiendo el por qué. Poco a poco voy vaciando todas las cosas que no paran de dar vueltas en mi cabeza y que necesito desechar cuanto antes. Saber a ciencia cierta que la mejor solución es olvidar que me importas.
Y siempre es el cuento de siempre, siempre la misma canción que suena y suena y suena y parece ser que seguirá sonando mientras mi paciencia infinita y la extraña confianza en ese karma que dicen por ahí que me recompensará se ríen de mi.
Estaba totalmente convencida de tantas cosas que ahora otra vez me hacen un lío angustioso que me anima a romper con todo y empezar siendo yo desde cero… pero eso ya es imposible y en el fondo creo que ni puedo ni quiero.
Pues me voy a dormir que no merece la pena seguir con esto que nadie entenderá.
Ahora solo quiero seguir soñando con escuchar mi “claro que sí gilipollas” después de preguntar “¿me quieres?”.
Hace mucho tiempo que no escribo aquí y en realidad no sé cuando volveré a hacerlo.
El caso es que acabo de ver ese video y no he podido evitar acordarme de vosotras. Tengo seis primas, cuatro titas y una hermana que, junto con mi madre, mis dos abuelas y yo, formamos las quince mujeres de mi familia. Quince que curiosamente es el número de la niña bonita. Bonitas... unas Muñoz y otras Triviño, para mi todas y cada una de ellas es imprescindible en mi vida.
Por acompañarme siempre. Gracias.
Comparto con vosotros la poesía que mi madre escribió a mi abuela Dolores hace unos años.
En Octubre del 56, desde Málaga a Novelda del Guadiana, llego una familia para en el pueblo toda su vida quedarse. Y por nombre les pusieron: "Malagueños", para así conocerlos antes. Y sembraron sus raices, hasta que Dios los llame. Muchos fueron en aquellos tiempos, los emigrantes, todos son amigos, como una familia grande. Y a Misa de domingo y festivos, está de mas que ella falte. Y si alguna persona muere, allí está ella para amortajarle, y rezarle una oración, con todos sus familiares. Muchos enfermos a socorrido, con comida o al médico llevarles. Cuando la vida era dura, ella sabía hacerla llevadera y agradable. Y en los años 70, churros en el pueblo hace. Amiga y madrina de feriantes, costurera o modista (como tú quieras llamarle), vestidos de novia hacía, de niños y de madres. Y para las jóvenes, en la feria, vestidos muy elegantes. En la central de teléfonos, las 24 horas del día a ella podías llamarle, pués como operadora, todas las horas hace. Llevó el bar de los Pensionistas, algunos años ya hace. En su casa, humilde pero con un coranzón grande, de hostal y casa sivió a muchas gentes andantes, médicos, misioneros, músicos, guardia civil, comerciantes, y personas trabajadoras, de todos los sitios y partes. Para ayudar a su marido a sacar su casa adelante. Hoy, con 76 años, ahora sin tener que trabajar, pasearse por las calles de Novelda puede, no le falta a nadie su adios y ratito que les hable, con la sonrisa en su cara a todos va ha saludarles. Como mujer y madre, tres hijos dió a luz: Francisco Miguel, María dolores y Teresa de Jesús. Los tres, son Triviño Fernández. Y su educación recibieron de ella, para que en el mundo, personas con amor y paz no falten. Todos la conocéis y si acaso alguien aún no lo sabe, se la presento: Ella, es mi madre, la "Malagueña", Dolores Fernández Fernández. Y en su honor a esta gran mujer: "¡Viva todas las madres!".
(c) 2000-"A mi madre"-Teresa de Jesús Triviño Fernández
Actualizo hoy por todos los momentos inmejorables que me torturan al recordar que se acabó. Me extraña que no recuerde nada de lo que soñé mientras dormía y ahora cuando me paro a pensar me sorprenda con lo que viví. A lo mejor lo he mezclado todo y muchas de las cosas solo fueron producto de mi imaginación. Me pregunto ¿por qué en friends nunca discutían? Yo me niego a permitir que todo entre los seis se estropee y mientras lo lees estás pensando “Qué tonterías dice esta Marina, ¡no se va a estropear nada!” pero reconozco que empiezo a preocuparme. A pesar de que tenga un contrato con mi peor mejor amigo espero que pronto todo vuelva a la normalidad. Yo tengo la pulsera de la esperanza y la tranquilidad de que dormimos como en siesta y eso demuestra que no soy buena pitonisa. “Quiero que pasemos todos un verano increíble ¡y muchos inviernos!”.
Desde aquí un recordatorio a la pequeña 01’5 que no se despegaba de nosotros, a nuestros gorros, la roca que nos permitía ver las estrellas tumbados en la arena, las alegrías tontas, las canciones y los momentos que no se han vuelto a mencionar pero que me encanta recordar.
También estos dos días me han dado para darme cuenta de muchas cosas. Pero no quiero pensar más… ya he aprendido que no suele venir bien.
Pasé el día deprisa, deseando cuanto antes llegar a estar ahí.
Casi estuve sin soñar hasta que, por fin, apareciste.
Esperando, inquieta y en calma, como despierta.
Preparé mi mejor sonrisa
y me puse brillo de labios antes de cerrar los ojos.
Sabía que si, que esta noche te vería en sueños."
No sé en qué estaría pensando al escribir eso
pero me ha encantado releerlo.
Me voy a dormir, sin pendientes, sin brillo de labios, sin mi hermanita y con la esperanza de que el temario de mis próximos exámenes no ocupen más en mis sueños de lo que deben.
Me voy a dormir, sin ganas, sin besos y sin sueño.
Por ti, porque aunque una parte de ti piense "¡Marina pelota! así no vas a conseguir nada" solo era una forma de intentar darte las gracias y un intento de “discumple las molestias".
Gracias porque estás siempre ahí cuando te necesito y cuando no, en los instantes más importantes y en los menos, en lo triste y en lo alegre, en mis llantos tontos (que son la mayoría) y en los momentos más alegres de mi vida… seguramente sin yo merecerlo, pero ahí estás siempre.
Ser mi hermana mayor debería reconocerse como un trabajo de alto riesgo.
...mi camino mágico...
PÁJARO: ¿Sábes qué pajarita? Hoy te voy a dar una sorpresa. PÁJARA: Uis, ¡no me digas! PÁJARO: He hecho un nidito para ti y para mi que cuando lo veas… te va a encantar. PÁJARA: ¿Un qué? ¿Ya has hecho un nido? Eres un atrevido ehh mira que te tengo dicho que yo soy joven para esas cosas todavía. PÁJARO: ¡Qué no, mal pensada! Que es para que estemos nosotros sin pajaritos ni nada. Es que si no lo hacía ya nos iban a quitar el sitio. PÁJARA: Aisss qué salao eres... y... ¿dónde está? PÁJARO: En una farola rara que hay pegada a la pared del antiguo rectorado de la universidad de Badajoz. PÁJARA: ¿Cómo? ¿En la universidad? jaja Vivir en una farola… nunca me lo hubiera imaginado, qué casa más vanguardista. De todas formas… no me puedo quejar que tú siempre piensas en todo churri, así los pajarillos nos van a salir cultos y todo. PÁJARO: Claro que sí pajarita. PÁJARA: Aisss, pues vamos a recoger los bártulos ¿no? PÁJARO: Tú ve a verlo y ahora llevo yo las cosas.
Y ahí están… felices al lado del gran pino piñonero. Aceptan visitas discretas.
UN DÍA DESPUES...
...manifiesto de dos pájaros perplejos…
“Queremos agradecer a teressamt por comentar la historia de nuestra mudanza que ayer decidimos hacer pública y compartirla con vosotros. Parece ser que dejo a todo el personal sin palabras.”
PÁJARO: Pajarita… me ha dicho la muchachita (jaja) esta que está estudiando biología y pasa casi todos los días por aquí abajo que ayer actualizó su fotolog con una foto de nuestra casa. PÁJARA: ¿Ah sí? ¿Te lo ha enseñado? PÁJARO: Pues... no pero dice que era una foto de la farola. Me pidió disculpas por no haber pedido permiso antes. PÁJARA: ¡Qué vergüenza! El instinto femenino me dijo ayer que tenía que limpiarle el polvo a la farola y menos mal que lo hice porque luego la gente comenta y critica. PÁJARO: Que va… si en el fotolog de Marina solo comenta Teresa. PÁJARA: ¡Jo cari… conoces a gente más rara que un trébol de cuatro hojas! PÁJARO: No es su culpa… es que a la gente no le interesan las historias de pájaros. PÁJARA: Pues entonces hoy tampoco dirán ni mu. PÁJARO: Ni pío.
"Un imbécil se tiene que comportar como un imbécil, y no te puedes enfadar poruque una persona se comporte como un imbécil,porque si un imbécil se comporta como un imbécil es que todo va bien." Concha Buika
Hay cosas tan claras que se vuelven transparentes y no las vemos. A veces todo está tan claro que inconsciente mente las ignoro. Pero ya está. Aunque lo haya dicho mil veces esta es la definitiva.
Mi pregunta se ha rendido… viviré loca y solo porque llegare a morirme sin saber... Qué no te daría yo.
En pocos días han pasado muchas cosas muy buenas. Hice una excursión de Botánica que me ayudó para motivarme aun más y conseguir aprobar el examen aunque parecía estar escrito en chino.
Fui a la IV Experiencia Naranja y no tengo palabras. Todas mis expectativas se cumplieron: cambiar de aires
conocer a gente sonriente
hacerme mil fotos
ver otros sitios
pasear sin pensar
cambiar de aires (si, dos veces)
no pensar
reir
y al carajo tanta tontería ya.
Después una semana que pasó volando y otra vez aquí… otra vez es sábado. Hoy me apetecía ver a mis amigos, hablar un rato, recibir abrazos y volverme a casa con un día más para recordar. Seguramente no sea posible pero no me pondré ya el pijama, hoy es noche de estar en chándal hasta el último momento porque “mientras hay chándal hay esperanza”.
Os pongo unas estrofas que me ha escrito mi compañerito Moisés:
Ella siempre con su sonrisa con su buen hacer y simpatía nos va repartiendo a todos un poquito de alegría.
Se metió en Biología y no nos podemos quejar porque nos da compañía y no le va mal.
Ella es pequeñita pero tiene un gran corazón pues no te echa una mano te echa un montón.
Vive en un pequeño pueblo que no tiene ni gatos pero con poco ella se arregla para pasar buenos ratos.
Ahí queda. Si es que cuando yo digo que estoy rodeada de artistas no lo digo por decir. Me gusta que la gente tenga una imagen alegre de mi. ¡¡Gracias Moi!!
Espero que a todos y a todas os esté yendo muy bien.
Que los buenos tiempos os rodeen y que disfrutéis mucho
Ahora podría pasarme horas y horas y horas escribiendo sin parar y sin que salgan disparates extraños que ni siquiera yo entendía.
Alégrese todo el que me quiera pues solté a mi unicornio azul y dejé que se fuera a torturar a otras personas. Me deshice de todo lo que es fácil de imaginar pero imposible de ver y me paré a sonreír por todas aquellas cosas que estaba ignorando y que seguían ahí, pacientes, esperando a que les prestase algo de atención.
Al final salio “lo que pienso de verdad pero no veo que pienso pero es lo que pienso”, es decir, todas esas cosas que se intentan ocultar siempre que aparece una situación difícil pero que siendo realistas y utilizando la falsa lógica subjetiva te lleva a verlo todo mucho más fácil. Tengo la capacidad de alejarme mentalmente del suelo hasta verme como un puntito en mitad de un planeta enorme en el que no estoy para pasarlo mal y preocuparme por cosas que no hacen más que obligarme a perder el tiempo.
“El tiempo es lo que más corre” Una estudiante de magisterio de especialidad educación física.
No quiero escribir mucho más… solo que no tengo palabras para expresar lo que es tener la gran suerte de poder contar con personas que te hacen ver lo que ya sabías y no-arreglan nada… así no hay quien se ponga triste.
Hago siempre lo que considero más correcto y de la mejor forma que puedo asumiendo todas las consecuencias.
Ya es hora de dormir y, por suerte, puedo decir que un día más me voy con la conciencia tranquila y con una gran intriga por vivir todo lo que me espera.
Con el tiempo se acaba viendo todo y por suerte tú sigues estando allí, impuntual siempre, pero en el mismo sitio, y tres minutos más tarde de la hora acordada recibo la sonrisa más sincera del día.
Hoy la alegría sin motivo me desborda. No quepo dentro de mi y me encanta esta sensación.
Podría poner muchas canciones pero nada, gracias por usar un ratito de tu tiempo
leyendo por aquí, se agradecen comentarios y, como dicen por ahí… fique com deus.
Mes y medio sin escribir. Uno y un medio… ya estaban siendo demasiados aunque a mi siempre me parecerán pocos y tan importantes como me hiciste ver que eran.
Por fin he salido de la burbuja. Hace tiempo decidí dejar de confiar en las personas y fue un grave error. El problema está en creer en las palabras. Jamás lo entenderé pero seguiré como hasta ahora sin más remedio tropezar siempre con la misma piedra. No hay peor ciego que el que no quiere ver y a mi no me gusta ser la peor en nada. Quise ver y vi. Sabiendo desde el primer momento que no me gustaría. No fue para tanto, no me pondré dramática. Todo acabó siendo tal y como debería haber sido desde el principio. Yo por suerte siempre que la necesito está ahí mi PIB… porque cuando estamos juntas ni hambre, ni frío, ni miedo, ni sueño. Un día en una de las conversaciones filosósficas con mi padrino me dijo que las amistades de verdad son de secano, las que no hace falta estar todo el día regando… y qué gran verdad.
Cómo me alegro de tenerte pequeña… cómo sufro cuando tú sufres “tontona”.
Os dejo un video. Creo que algunas cosas son de eso que llaman…”filosofía barata” pero coincido con más de una frase. Ante todo… usad protector solar que eso sí que está científicamente demostrado. A ver qué os parece. (Yo me quedo con la niña del minuto 3:57 que me recuerda al día que mi hermana me puso los tubos. Lo que nos reímos cuando me los quitó y salieron de mi cabeza unos tirabuzones extraños y horribles de los que nos deshicimos urgentemente no sin antes hacer algunas fotos. Qué momentos.)
"¿Dónde estarás esta noche? ¿Qué llevarás puesto hoy? ¿Qué hará contigo la gente?..."
Me hago más preguntas de las que debería hacerme. &/()
*
"Ya no le quiero, es cierto, pero cuánto le quise.
Mi voz buscaba el viento para tocar su oído. De otra. Será de otra. Como antes de mis besos.
Su voz, su cuerpo claro. Sus ojos infinitos. Ya no le quiero, es cierto, pero tal vez le quiero."
(Fragmento adaptado del poema de Pablo Neruda
"Puedo escribir los versos más tristes esta noche")
Sé que el título no tiene nada que ver con lo que voy a escribir y también supongo que nadie encontrará explicación lógica a esas dos palabras pero… a mi me servirá para recordar que no hay nada como los momentos surrealistas que me regala mi hermana de vez en cuando. Hoy un puñadito de palabras para animarme a mi misma. No es egocentrismo, en absoluto, creo que a veces no está de más hablar con uno mismo.
Sabes que no tienes alas, que no ves el cielo, pero quieres volar. Crees tener los pies en el suelo. Mides cada paso, pero nunca lo das.
Poco a poco vas viendo las transformaciones de tu vida ¿A que sí pequeña? Y… ¿Qué te parece? ¿Te gusta? Yo creo que no está mal… que a esto se le pueden llamar buenos tiempos, que no tienes que tener mucha queja. Sabes que si algún día empiezas a extrañar las cosas que tenías debes deshacerte de ese pensamiento al instante. ¡Que no puedes hacer eso chiquilla! ¡Quiérete un poco más! Ahora centrare en tu presente que es lo que cuenta. Sin darle mil vueltas a todo como intentas hacer ahora pero atenta Marina, ve preparándote para cuando estalle la burbuja. Ve con cuidado pero vive tranquila mientras se mantenga. También ánimo para no ir con más de una a septiembre, intenta sacar buen provecho de lo que haces y sigue sonriendo que las personas que te rodean merecen verte alegre. Sabes que tu sonrisa no es ficticia, que tienes muchos motivos por los que sonreír.
“Cuando crezcas un poco te darás cuenta de que nada es tan grave como tú lo ves ahora” Atenta a todos esos consejos que te llueven de todas esas personas que no tienen ni idea de tu vida. Atenta a ellos porque te hacen ver qué es lo que transmites. Si no estás preocupada no hagas pensar a los demás que lo estás. Si no tienes miedo no hagas pensar a los demás que lo tienes. Pero sobre todo, si no te gusta estar así no hagas creer a los demás que sí, sabes que te engañas a ti misma. No te conformes, intenta hacerlo por una vez. Sé que te estoy hablando de no hacer caso a consejos y a la vez te estoy dando uno pero… bueno… sigue como hasta ahora ¿qué quieres que te diga? ¿DÓNDE QUEDÓ TU AMBICIÓN? Márcate objetivos y lucha por ellos. ¿Mirar? ¿Con tu edad crees que es lógico sentarte de brazos cruzados a ver pasar la vida? No marinnera, no dejes que los demás escriban tu cuento ya transformado en novela.
Mañana es lunes, creo que deberías irte a dormir. Descansa y sueña que eso todavía es gratis y confidencial. Ve a ver qué es lo que tienes en el subconsciente.
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…y encima tú, para goce de sufrimiento, me das un guiño de ojo…
Hoy ha sido un día raro. Creo que el más raro en lo que va de año y, teniendo en cuenta como es mi vida, será fácil imaginar cómo estoy ahora. Parecía que la mañana iba a ser entretenida y así lo fue. Desayuné con mi peor mejor amigo y tuvimos largas conversaciones que todavía me hacen pensar. A lo mejor no es el mejor momento para ponerme a pensar en el futuro por muy cercano que sea. Un futuro en el que ahora solo veo despedidas. Crecer, qué gran problema. El espíritu joven que hace que todos queramos comernos el mundo y el deseo de viajar nubla muchas de mis ilusiones. Porque “mejor o peor cada cual seguirá su camino”.
Acumulación de telarañas. Ese ha sido el problema de hoy. Ver que me preocupo por cosas sin sentido. Ver que me meto donde no me llaman. Que tengo que dar un pasito para atrás y observar participativamente desde un poquito más lejos. Acumulación de sensaciones también. Agobio por lo exámenes. Malas noticias. Buenos momentos. Hoy he tenido de todo. Y celos, si, pero en realidad te entiendo. Todo es raro y a lo mejor es mi culpa. ¡No hablas claro marinnera! Y no puedo hablar claro porque no hay nada claro. Ahora me quiero quedar en pause, soy así de caprichosa, y mirar qué es lo que pasa en realidad. Ahora soy yo quien no entiende nada. Y no, no me siento especial y tú no tienes culpa de nada ni has hecho nada mal. Debería mirar al suelo de vez en cuando y dejar que la vida continúe aunque, mientras pienso esto, también recuerdo que “a lo loco se vive mejor”. Intento buscar un término medio y será lo que intente llevar a cabo.
Empecé el día con la sensación de que sería especial. Con ganas de hacer regalos y recibir sonrisas. “Lo esencial es invisible a los ojos”. Esa frase debe estar en ese libro. Siento todas esas cosas invisibles. Una parte de mi las tapa pero es absurdo. Supongo que solo será momentáneo, que mañana volveré a despertarme con una sonrisa y todo seguirá como siempre. Lo supongo y lo espero. Mientras me quedaré pensando sin llorar, porque tengo que reservarlo para cuando me toque el cupón y estoy amenazada sigo haciéndolo.
__Que ser valiente no salga tan caro. __Que ser cobarde no valga la pena. __Que no te compren por menos de nada. __Que no te vendan amor sin espinas.
(foto desde las alturas)
Tonta, muy tonta.
“Me llamo Marina y mi animal es una Mariposa” después de decir eso apoyo las manos en mis caderas a modo de que los brazos formen alas y comienzo a hacer un extraño sonido. Si, así fue mi presentación el primer día de ese curso de monitores que hice en verano y que a todos nos marcó un antes y un después.
Hoy me acordé de eso escuchando “Yo seré la eterna mariposa que no se posa ni reposa”. Ni me poso ni reposo. Ni paro ni descanso. Ni vivo ni dejovivir… pero tengo toda la vida por delante, tenemos toda la vida por delante. Ahora no tengo prisa por nada, no me importa sentarme sobre el miedo de correr.Esperar sentada sobre las ganas que me hacen vivir a lo loco y sin pensar. “Hay corazones que van despacio, locos y ciegos buscando su espacio”. Eso si, pa’ fuera telarañas, no voy a permitir que personas que me importan sufran por mi culpa. “Sufran”, hay que ver, eso suena demasiado fuerte. Sé que no es tanto como sufrir pero a veces hay personas a las que hago sentirse mal aunque es lo último que pretendo. Intento que todo esté bien, vivir con “la sonrisa desatada” y con que haya quien me diga que le hago feliz a ratos ya me doy por satisfecha.
Porque fue suficiente hablarle con los ojos desde allí. Si en ese mismo instante su vida era tranquila y feliz la vino a revolver.
Ahora todo se malinterpreta, cada palabra, cada canción, cada ausencia… todo cuenta incluidos los detalles tan insignificantes que ni siquiera existen. Pero ahora dejo pasar cosas que hace un par de años no soportaría. Eso se llama… crecer ¿no? Tengo mil cosas que agradecer y no sé si tendré oportunidad de demostrar que todo lo que hago o digo es con la mejor de las intenciones.
Es una pena tener reloj y no tener cadena pero…
¿sábes qué es peor? tener cadena y no tener reloj.
Mucho tiempo sin escribir aquí… pero hay demasiadas cosas en mi cabeza y nada de lo que escribiese tendría sentido para los que leéis. Quizá ya es momento de recapitular un poco aunque sea escribir sin sentido. Pasaron los carnavales aunque creo que decir que pasaron es absurdo. Ya siempre estarán ahí, en la memoria, siempre presentes. Porque es importante cada momento, cada gesto y cada conversación de esos dos días para intentar comprender todo lo que me rodea. “Acumulación de buenos momentos” lo llamé en su día sin pensar en la gran verdad que acababa de decir. Acumulación que aturde y hace que no todo sea tan especial como podría ser. Ahora hago memoria a cada instante casi sin querer y sigo con la observación participativa esta vez sin plomo ni ningún otro elemento químico que frene las cosas que merece la pena vivir. Sin ser mi propia enemiga. Feliz porque oí cosas que jamás hubiera imaginado… o sí que lo imaginé pero no pensé que pudiera ser real. Como en un cuento, esta vez más que nunca, encantada de que todo sea como es y harta de atender más a lo malo que a las cientos de cosas buenas que me llegan.
Dejo de pensar en este pasado cercano y mi mente vuelve a hoy. Creo que fue una suerte que ese año las temperaturas fuera favorables para que se pudiera recoger el algodón que, meses después de su recogida, pasaron a ser finas hebras de hilo. Transportado hacía una fábrica tal vez americana el hilo llega y las máquinas están listas para empezar a transformar lo que nació de una semilla en tela. Una mañana, tarde o noche alguien se sienta y comienza a diseñar un dibujo. Aunque quizá tardó en decidirse hasta que lo consideró terminado acabó teniendo en sus manos el verano infinito.
No es que esté obsesionada con esa frase, es que esa frase puso título a lo que yo quería que fuera mi vida y no sabía como llamar. “The Endless Summer” (El Verano Infinito). Una camiseta que es tantas cosas… es alegría, risas constantes, escaleras, ocio, “sol y diversión”, una pequeña parte de ti, un futuro pijama para mí. Sé que ninguna de las personas encargadas de su fabricación podría ni imaginarse de lo feliz que me ha hecho sentir ese cachito de tela. Siempre lo consigues.
Hago difícil lo fácil y no sé por qué. Curiosamente soy capaz de apartarlo todo y refugiarme en la Biología para no pensar más de lo que debo. Entre lípidos y glúcidos de vez en cuando aparecen en mi mente recuerdos que me saturan y también otros que me endulzan los dos segundos de desconexión que me permito. Sé por qué me comporto así. Sé que debo ir con más cuidado que nunca. Ahora noto que ando sin red de seguridad que me acune si tropiezo. Noto que no puedo robar tiempo de estudio a esas personas que me sujetaban siempre que era necesario. Ahora tengo que navegar siguiendo un rumbo intuitivo que me van marcando los días cargados de sensaciones, emociones y sobre todo largas horas de conversaciones. Puntuando este cuento que decidí empezar desde cero hace unos meses. Y lo llamo cuento porque nada me parece real, porque a veces parezco una niña que comienza a ver el mundo a través de personajes ficticios que le muestran lo bueno y lo malo. Observando de forma participativa, aunque haya quien no esté de acuerdo, avanzo sin tener ningún interés en descubrir el final. Que cada párrafo me sorprenda y sintiéndome orgullosa de compartir estas páginas de mi vida con vosotros.
Quiero algo que ni siquiera yo misma puedo dar y no sé cual de los dos caminos es el más conformista, si el olvidarlo todo o el idealizar algo casi perfecto. Vivir la extraña sensación de llorar de rabia y que esas lágrimas me sorprendan a mi, que tengo asumido desde hace tiempo que soy sensible en exceso… intentar evitarlo y ser incapaz… A veces algo tan simple significa tantas cosas… A la vez pienso que debería estar sonriendo. Al fin y al cabo es mi cuento, no puedo permitirme seguir como siempre, con preocupaciones sin sentido, como antes. ¡Contenta, siempre contenta! Y llorar por cosas que merece la pena, como esta, si, porque esta sí que tuvo sentido. Llorar de impaciencia.